DEL BRICHERISMO Y OTRAS AVENTURAS

por María Luz Crevoisier-Desde Lima (PERÚ)
El vocablo Brichero”, así a secas y en verso, suena como si se tratara de alguien que recolecta brisas, pero su verdadero significado es muy diferente a este término y tiene otra consonancia. No sabemos si ya figura dentro del Diccionario de la Real Academia Española pero sí nos consta que forma parte del lenguaje popular cusqueño, después de haber nacido al acaso por los años 70, según nos refiere el escritor Mario Guevara Paredes, quien adoptó el término para construir algunos de los relatos que ha reunido en el libro “Cazador de gringas & otros cuentos”.
El bricherismo, es una forma de vida surgida después de la Reforma Agraria y no es otra cosa que la caza de gringas o sea, de la conquista de extranjeras para vivir de ellas o dicho de manera romántica, enamorarlas esperando ligue un viaje al extranjero o sirva para poner por lo menos un negocito que le saque a uno el diente del mal año. Y parece que algunos tuvieron suerte.
El bricherismo se extendió también a las mujeres, pues por qué se iban a quedar atrás ellas, liberadas según su propio decir y con una mente más amplia que sus madres y tías, tal como lo demostraron a su manera. No hay cifras de cuantas volvieron de aquellos viajes misteriosos o si sucumbieron en el intento. Porque de todo hay.
Mario, quien hizo historia al crear la revista cultural sureña SIETECULEBRAS, edición de larga circulación, también incursionó por ese campo, aunque según él y no tenemos por qué dudarlo, lo hizo por pura diversión.
Antes de pasar revista a su libro “Cazador de Gringas &, otros cuentos” (sexta edición-Edición conmemorativa-1995/2025) nos quisimos ilustrar un poco sobre aquél polémico oficio y entablamos una conversación on line, con el escritor.
“El término Brichero, no fue inventado por mí, sino que lo descubrí durante mis correrías por tabernas y pubs de la ciudad. Como no existían referencias sobre el personaje que lo practica, elucubré una serie de historias que se fusionan historias propias y ajenas de bricheros que tuvieron relaciones de pareja con extranjeras. Lo hice de manera irónica en el tratamiento de los personajes del cuento”.
-¿Por qué te hiciste brichero y por cuánto tiempo? ¿Alguna de tus conquistas te llevó al extranjero?
Entiendo que para muchos ser brichero era un oficio. Lo practicaban todos los días. En mi caso fue una diversión. Conocer extranjeras, conversar con ellas, viajar. Fue un pasatiempo de vez en cuando y ninguna me llevó fuera del país. A veces se enamoraban el uno de la otra y viceversa, pero eso duraba solo mientras la turista estuviera en Cusco, después, todo quedaba ahí.
¿Cómo fue el proceso?
Por aquellos años de los 70, con el auge del turismo internacional y los cambios sociopolíticos, muchos jóvenes extranjeros se entusiasmaron con aquello de la espiritualidad y la tradición andina. Su presencia en locales cusqueños, el uso de la droga, el amor libre, trastocó las costumbres tradicionales y el Cusco dejó de ser la urbe provinciana para convertirse en una urbe cosmopolita. En ese contexto hace su aparición el brichero, hasta convertirse en un símbolo socioeconómico y cultural propio de nuestra ciudad. Fue el indian boy soñado por las gringas, agregamos por nuestra parte.
Mario, dejó por un tiempo el país y se fue a recalar por otros caminos como Venezuela durante dos años. Al regreso fue cuando se metió de soslayo en la nueva movida llamada bricherismo que le sirvió de material para la construcción de entre otras, nueve ficciones literarias de esta reedición de “Cazador de Gringas& otros cuentos”y que recrean el ambiente urbano del Cusco de fines del siglo XX,

La publicación conmemorativa celebra los 30 años de la primera publicación y cuenta con los estudios de dos destacados críticos literarios: Miguel Angel Quemain (México/UNAM) y Jorge Terán Morvelli (Perú/UNMSM).
CONMEMORANDO LOS 30 AÑOS
Me llegó por fin el esperado envío y revuelvo sus 106 páginas para encontrar los nueve relatos que conforman esta novísima edición, siendo estos: Patrick, Guía de Turistas, La Obsesión de Nico Bilbao, El parecido, Noche de Brujas, Todo un perro, De la llegada del Señor Presidente, Zona de emergencia, Cazador de Gringas.
Con estos retratos de la vida en la ciudad, Mario Guevara hace su ingreso a la narrativa urbana, tal como lo especifica el escritor y estudioso Juan Alberto Osorio. Y es precisamente esta prosa literaria la que lo acerca a los grandes representantes nacionales de este género como Julio Ramón Ribeyro, Mario Vargas Llosa, Enrique Congrains, Oswaldo Reynoso, pero con la diferencia de que Mario escribe movido por esa tendencia criolla entre picaresca e irónica tan cusqueña e irrepetible, utilizando el humor negro como ocurre en Todo un Perro, o De la llegada del Señor Presidente.
Un relato que conlleva un fondo psicológico es el de Patrick, en el que se muestra la frustración de dos personajes que fueron amigos en el colegio, pero se distanciaron por el resentimiento y deseo de venganza de parte de uno de ellos. Con La obsesión de Nico Bilbao, se aleja de lo urbano para adentrarse en lo anécdótico y aventurero, al referirse a un personaje cuyo único destino posible es encontrar el Paititi y quien desaparece en el intento (tema recurrente que también fue utilizado por otro escritor cusqueño, Manuel Salas Córdova en la novela “De París al Paititi”).

“Cazador de Gringas” se podría resumir como el cazador cazado, pues la supuesta conquista, le sale ganándole la partida y envolviéndolo en un lío policial.
A esta edición, le añadimos otras publicaciones anteriores como “El desaparecido” (1988),”Usted, nuestra amante italiana” (2010) homenaje a uno de los íconos del cine italiano, Ornella Mutti , “Matar al negro”, (33 cuentos cortos), 2017, Cuentos cortos (homenaje, 2015) ,Cuentos de la selva alta (2016) y “Gringas sí, yanquis no” en el 2011.








































