Una mirada bajo el agua, Oliver Velázquez Quijano

Foto por Roberto Mata
por Alejandro Alonso
Las travesías marítimas del capitán francés Jacques-Yves Costeau que cautivaron a más de una generación, quedaron indelebles en la infancia de Oliver Velázquez Quijano, Ciudad de México 1972, como una experiencia trascendente. También con el imán de los documentales de la BBC presentados por David Attenborugh, su fascinación vira en vocación. Cursa la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, Universidad Nacional Autónoma de México, y logra certificarse como buzo tres estrellas por la Federación Mexicana de Actividades Subacuáticas.
Apasionado de la fotografía de naturaleza, con una amplia trayectoria profesional, camarógrafo y camarógrafo subacuático, productor, director de documentales de naturaleza y divulgación científica, inicia su travesía a mediados de la década de los noventa.
“Todo comenzó en 1994, cuando participé como asistente de producción en una película mexicana titulada Dulces compañías, dirigida por Óscar Blancarte, esto me permitió integrarme a otras producciones. Mi primer paso por televisión se da con la serie Mochila al Hombro del XEIPN TV Canal Once, donde realicé mi servicio social, en 1996; después me llamaron para participar en la serie de naturaleza Los Últimos Santuarios, muy enfocada a temas ambientales”.

Oliver en sus inicios. Foto por Jorge Calderón
Un paso atrás en su camino por televisión, Oliver Velázquez dividía su tiempo de la universidad con un curso de buceo deportivo, en el equipo de buceo de la UNAM, pero su trabajo como camarógrafo subacuático no vino de inmediato.
“Al comenzar a participar en la serie de Los Últimos Santuarios, se abrió un mundo de posibilidades que desconocía hasta ese momento. Lo primero que hicimos fue internarnos en la selva durante la noche; nuestro propósito era grabar unos murciélagos en la reserva de Sian Ka’an. Después, cuando conocí el desierto del Vizcaíno donde se encuentra el berrendo, uno de los mamíferos más rápidos de América, quedé maravillado”.
Oliver Velázquez adquiere su primer cámara subacuática, marca Sony modelo Hi8 TRV86 con un housing Gates, decidido a empezar a contar historias subacuáticas, consciente de la especialización que esto amerita.
«Antes de iniciarte en la fotografía subacuática, primero debes aprender a estar bajo el agua. Ingresas a un mundo completamente ajeno al tuyo; debes de respetar las reglas y seguir lineamientos de seguridad para que todo salga bien».
Oliver Velázquez Quijano
“Practiqué durante cinco años el buceo antes de aventurarme. Lo que comenzó como un hobby en la universidad, se convirtió en mi carrera y una gran pasión”.
Esta es la distinción que le permite destacar en los equipos de producción habituales.
“Mi primer trabajo profesional acuático se da con las tomas submarinas en la laguna de San Ignacio, Baja California Sur. En principio, para encontrar a una ballena gris tardamos más de tres meses de travesía marítima; nos esforzamos bastante hasta lograr las tomas subacuáticas; sólo tuvimos dos oportunidades y finalmente logré tirarme al agua y realizar unas imágenes de la hembra y su cría. Esto fue en 1997 y mi experiencia con las ballenas queda registrada en el documental Kuyimá, danza con nubes, 1997, para Canal Once y bajo la dirección de Fabricio Feduchy”.
Su primer periodo profesional viene acompañado de viajes constantes: las islas del Mar de Cortés, el sistema de arrecifes de Veracruz, los cenotes del área maya, las costas de Oaxaca y las Islas Revillagigedo, entre muchos otros sitios, con la finalidad de conocer a las ballenas azul y gris, al lobo marino, a los tiburones ballena y martillo, así como a las tortugas, entre muchas otras especies. Lo importante es que con cada incursión, a Oliver Velázquez le queda muy clara la medida del respeto hacia la naturaleza.
“Los escenarios acuáticos te demandan mucho respeto y no contaminar. Son lugares donde la vida tomó formas espectaculares, como las medusas que parecen volar en el agua o los calamares que cambian de color y se camuflagean en tonos increíbles gracias a sus células fotosensibles, hasta las cuevas submarinas en el Caribe, donde debes de sentirte cómodo con el ambiente además de tener un entrenamiento como espeleo buzo, pues es muy fácil que te pierdas por la poca luz y visibilidad existentes. Si conoces y respetas las reglas de cada sitio, entonces podrás desplazarte con seguridad y contar sus historias”.

Foto por Pablo Casa Cueva
Con su acreditación en el gremio de la divulgación científica, se suman producciones bajo la tutela de Carlos Prieto, Fabricio Feduchy, Manuel Martínez y el reconocido fotógrafo Fulvio Eccardi. Hacia el año de 2003, el camino queda trazado para que comience su labor de manera independiente, como fotógrafo, productor y director. La constancia es el documental sobre La Boya Oceanográfica, UNAM 2006, con la tutoría del Dr. David Alberto Salas de León y con el apoyo de Omar Iturbe en la producción.
“Es uno de los proyectos más significativos en mi trayectoria. La boya oceanográfica detecta tsunamis y fue desarrollada por el Instituto de Ciencias del Mar Limnología, de la UNAM. Para lograr esta historia viajamos tres veces a la Isla Socorro, que forma parte del archipiélago de Revillagigedo”.
De acuerdo con Oliver Velázquez, cada proyecto tiene su historia propia y La Boya Oceanográfica se pinta sola.
“Estuvimos presentes en todos los procesos para la colocación de dicha boya. Primero lanzaron una boya provisional con un correntómetro, mismo que indica la mejor posición para la boya definitiva. Un par de meses después, filmamos la colocación de la boya definitiva, pero el mar no perdona y un huracán pasó por encima de esta, justo en etapa de temporales. Documentamos todo el mantenimiento que le dieron para dejarla funcionando; meses después, obtuvo sus primeros resultados. La historia a destacar es que durante el año aplicado a la postproducción, sucedió un tsunami en el mar de Banda, en Indonesia; la boya del Instituto de Ciencias del Mar de la UNAM, detectó el tsunami antes que lo hicieran los equipos de Estados Unidos. Nuestra historia llega justo hasta el evento del tsunami. Gracias a este trabajo ganamos varios premios como Pantalla de Cristal 2006 a la mejor producción de divulgación científica”.
Del mar a la tierra, las historias de Olivier Velázquez también tienen el sello del desierto.
“Otro trabajo que también me dejó una gran satisfacción, fue el que hicimos para la revista National Geographic. Aquí contamos la historia del descubrimiento de una nueva especie de dinosaurio, en Coahuila, México: el Yehuecauhceratops mudei. Con el apoyo de los paleontólogos responsables del hallazgo, explicamos cómo se fosiliza un hueso, después de millones de años, además de que damos a conocer el trabajo de un paleontólogo en el desierto. Pasaron cerca de dos años, de 2013 a 2014, para que se publicara el documental, con un apoyo vital del Museo del Desierto en Coahuila. Finalmente, el producto aparece como un complemento al especial que la revista de National Geographic dedica al descubrimiento de una nueva especie de dinosaurio”.

Foto por Luis Ernesto Nava
La presencia institucional de Oliver Velázquez es amplia, además de Canal Once y Discovery Chanel, ha colaborado con la Comisión Nacional de Buceo Subterráneo y Espeleológica, de la Federación Mexicana de Actividades Subacuáticas, TV Azteca, con la serie Hospital Veterinario para Canal Once, Grupo Expansión y CNN en español, entre muchas otras. Esta experiencia logró canalizarla a su propia empresa.
“Oliver VQ se funda en el 2014 y caracteriza por contar historias cuyas imágenes maravillen al espectador, y a partir de ahí engancharlo hacia lo que se investiga o descubre. Entonces la riqueza visual es su distintivo principal”.
«En México, el tema de fondeo y presupuesto significa una historia por sí misma, más si se trata de cultura ambiental o divulgación científica».
Oliver Velázquez Quijano
“Siempre tienes que buscar historias o proponer proyectos, debes de vencer las barreras presupuestales, ya que lo más importante es encontrar la historia y, poco a poco, te darás tiempo para contarla. Mi postura es procurar no sacrificar la calidad por un presupuesto y siempre buscar el tiempo suficiente para contar la historia que quieres. A veces los animales se mueven en épocas muy diferentes o muy largas, así que debes considerarlo”.
Además de librar el tema del presupuesto para producir una pieza independiente, Oliver Velázquez aplica su experiencia para vincular conocimiento y creatividad de manera asertiva.
“Cuando veo el potencial que una historia puede tener, no me cuesta trabajo imaginarla; lo primero que tienes que hacer es platicar con el investigador titular o responsable, para entender el proceso y cuál es la finalidad que persigue. Por ejemplo, cuando fui a ver cómo trabajan los espeleo buzos en una expedición, lo más importante que debía tener muy claro era el tema de la seguridad; ellos se dividieron en grupos de tres buzos para elaborar un mapa de la cueva en Río Mante, Tamaulipas, con el fin de tender un nueva línea de vida y realizar una colecta científica. El buceo en cuevas es uno de los deportes más peligrosos del mundo, así que primero debes tener en cuenta cómo trabajará cada grupo para documentar su labor, ver desde que ángulos, acciones y sin entorpecer la toma de datos. Son expediciones de cinco o más días; además de la observación y el registro, la labor del divulgador es encontrar o imaginar una nueva narrativa, una forma diferente de trasladar esa historia al espectador. Las comparaciones y analogías siempre ayudan para entender un proceso y su contexto. Si haces un esfuerzo por vincular ciencia y arte, debes aplicar la imaginación”.

Foto por Roberto Mata
El documental De regreso al nacimiento del Río Mante fue seleccionado en la l Muestra Nacional de Imágenes Científicas, MUNIC 2016; años después, entre 2017 y 2018, se dedicó a un proyecto de registro de las estrellas de mar encontradas en una ofrenda arqueológica localizada en los vestigios de la antigua Tenochtitlan, con 500 años de antigüedad. Hoy día, Oliver Velázquez aprovecha las redes sociales para divulgar su trabajo, con un público bien definido.
“Me enfoco a los jóvenes adolescentes. Cuando comencé a ver estos documentales de niño, lo que me atrapó mucho fue la aventura del conocimiento y me preguntaba: cómo le hacen para obtener esas historias. Ahora me doy cuenta que existe una infinidad de lugares increíbles en México por cuidar, conocer y explorar. Todo esto deseo compartirlo a los jóvenes”.
Oliver Velázquez es un divulgador en activo, que así como explora sitios recónditos, también es accesible para exponer sus formidables experiencias en aulas.
“Considero que mi trabajo siempre me lleva a mantenerme al día y estar bien informado. Cada proyecto te obliga a superar lo último que hiciste, así que cada producción representa un reto. Eso te lleva hacia una nueva aventura. Así como comparto mi trabajo con la gente y los jóvenes, también estoy atento de mis colegas, de su pasión y entrega en lo que hacen. Creo que todos vamos al mismo camino, motivados por la gran pasión que es contar una historia”.
El trabajo fotográfico de Oliver Velázquez Quijano se exhibió en la exposición temporal titulada “Maravillas Marinas”, 2018, en el Museo de Historia Natural de la Ciudad de México, en la que refrendó su filosofía por generar historias que fomenten una conciencia sobre la conservación de nuestros recursos naturales. Entre sus colaboraciones recientes, está el Laboratorio de Mamíferos Marinos de la Facultad de Ciencias de la UNAM, con la Dra. América Nixtin Castañeda Sortiban. Actualmente colabora con la periodista poblana Silvia Campos; juntos fundan el periódico nacional Nuevo Diario, en formato digital, enfocado a la promoción de historias y producciones audiovisuales como la serie de turismo sustentable Playa Viva, Río Mante expedición 2022, entre otras. Su trabajo fotográfico forma parte de la Galería Arte Contemporáneo SMA.
Sumérgete en la mirada bajo el agua de Oliver Velázquez Quijano
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Instagram: oliver_vq209
Vimeo: https://vimeo.com/user10554650/videos
Biografía del autor: Alejandro Alonso Aguirre, es un destacado escritor mexicano, egresado de la Universidad del Claustro de Sor Juana, premio nacional de periodismo en diversas emisiones y narrador audiovisual, además es Director de Concordia Mundo, empresa enfocada al diseño de estrategias educativas y de divulgación científica.

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